Con ocasión del Comité Forestal de la FAO, que se celebra en Roma, se analizan asuntos como la contribución de los bosques a la agenda de desarrollo pactada por la comunidad internacional para 2030.
Reproducimos la nota de la Agencia EFE, tomando los datos ofrecidos por La Vanguardia el 16 de julio de 2018
Roma, 16 jul (EFE).- La gestión forestal debe alinearse con los demás objetivos de desarrollo sostenible mediante la reforestación, la participación de las comunidades y la mitigación del cambio climático, opinaron hoy responsables gubernamentales en la FAO.
Representantes de distintos países se reunieron en Roma con ocasión del Comité Forestal de la Organización de la ONU para la Alimentación y la Agricultura (FAO), que esta semana tiene previsto analizar asuntos como la contribución de los bosques a la agenda de desarrollo pactada por la comunidad internacional para 2030.
Uno de esos objetivos globales está relacionado con la conservación y la recuperación de ecosistemas terrestres como los bosques.
La viceministra de Medio Ambiente de Bolivia, Cynthia Silva Maturana, recalcó en un acto que "los bosques no se pueden gestionar al margen" y hace falta una "política integradora" que permita manejar adecuadamente esos recursos naturales.
Además, pidió "entender todas las complejidades" de los sistemas forestales y adaptarse más a las características de ecosistemas tan distintos como puedan ser la selva amazónica o el bosque del Chaco en Sudamérica.
El presidente de Sri Lanka, Maithripala Sirisena, aseguró que la tala de árboles para permitir los asentamientos ha llevado a la erosión de muchas zonas en su país, por lo que se han propuesto reforestarlo con cinco millones de árboles antes de 2020.
En Indonesia, los bosques cubren el 70 % de la superficie, donde viven 10 millones de personas en situación de pobreza, afirmó la titular de Medio Ambiente de Indonesia, Siti Nurbaya Bakar.
Explicó que el Gobierno ha decidido entregar 1,7 millones de hectáreas forestales a un millón de esas personas para que las gestionen y dejen de ser pobres, al tiempo que está trabajando en la repoblación de árboles y la reducción de incendios.
La ministra apuntó que la tasa de deforestación se ha reducido a unas 400.000 hectáreas anuales en un país conocido por la explotación forestal a manos de la industria del aceite de palma.
El consejero del Ministerio de Medio Ambiente de Senegal, Racine Diallo, indicó que en África los bosques son "esenciales" para la seguridad alimentaria y el suministro de agua, tan importante para las comunidades de pastores en el Sahel.
El senegalés mencionó un programa para proporcionar energía a partir de la madera del que se benefician 600 organizaciones locales, mientras que el representante del Líbano, Louis Lahoud, citó los planes de su país para combatir el cambio climático plantando más árboles.
La deforestación se ha ralentizado en los últimos años a nivel mundial, de modo que la cubierta forestal pasó del 31,6 % de la superficie global en 1990 al 30,6 % en 2015, según la FAO, que recuerda que los bosques aportan alrededor del 20 % de los ingresos de los hogares rurales en los países en desarrollo. EFE