En los primeros años del siglo XX se planteó actuar en la franja atlántica gaditana en algunos terrenos costeros inestables e inertes y sometidos a una fuerte erosión eólica que en un proceso natural formaba dunas litorales, móviles y dinámicas. La intervención estaba motivada por los desplazamientos dunares que invadían poblaciones, carreteras e infraestructuras, montes y cultivos próximos. Actualmente se han convertido en formaciones vegetales de gran interés por su variada composición de un indudable valor paisajístico y recreativo.
fijación_de_dunas_litorales_y_formación_de_pinares_costeros.pdf