23
Abr
2018

Sobre la introducción de Xylella fastidiosa (Wells et al.) en España

Xylella fastidiosa es uno de tantos organismos exóticos peligrosos para nuestros vegetales que se han introducido en España en los últimos veinticinco años.

Detectada por primera vez en California a finales del siglo XIX produciendo daños sobre viñedos, dio el salto a Europa en Italia en 2013 detectada en una nueva especie hospedante, el olivo. Actualmente se calcula que más de un cuarto de millón de hectáreas de olivares está afectado por esta enfermedad en Italia. En el sur de Italia se ha detectado también sobre Nerium oleander y Polygala myrtifolia En 2015 apareció en Córcega y localizaciones de la costa mediterránea francesa.

A finales de 2016 se detectó en las Islas Baleares. Seis meses después, en junio de 2017, fueron encontrados daños por la bacteria en la península ibérica, en Guadalest (Alicante). Posteriormente fue detectada en parcelas de almendros de Alcalalí, Altea, Balones, Benigembla, Benimassot, Benissa, Calp, Facheca, Gata de Gorgos, Llíber, Parcent, Quatretondeta, Senija, Tàrbena, la Vall d’Alcalà y Xaló., todas en la provincia de Alicante.

Según declaró la administración de la Generalitat valenciana, se confirmó que la bacteria tiene como insectos vectores al menos a Philaenus spumarius y Neophilaenus campestris, recogidos en parcelas infectadas o sus alrededores de seis municipios diferentes. Como la bacteria se transmite por la picadura de, al menos, estos dos insectos chupadores es difícil aislar la infección y evitar su propagación.

El pasado 10 de abril de 2018 se detectó un primer caso de Xylella fastidiosa en un olivo, situado en una finca del municipio de Villarejo de Salvanés (Madrid).

Xylella fastidiosa puede causar graves daños en cultivos como el olivo, vid, frutales de hueso, cítricos, almendros. Está además citada X. fastidiosa en más de 300 plantas hospedantes. En muchas de ellas no provoca daños aparentes, y pueden actuar como reservorios de la bacteria. Los principales cultivos afectados, además de los citados, son principalmente leñosos, y entre ellos destacan el melocotonero, y la adelfa, aunque muchos otros son también susceptibles en distinta medida, entre ellos peral, ciruelo, aguacate, arándano, y distintos árboles ornamentales como plátano de sombra, robles, olmos, arces, liquidámbar, etc. No obstante hay que tener en cuenta que es un organismo exótico del que ignoramos si las especies forestales españolas, al ser infectadas por X. fastidiosa se comportarían como reservorios de la enfermedad, presentaran inmunidad o podrán desarrollar la enfermedad. Tras introducirse en el árbol se desarrolla en el sistema circulatorio de la planta y puede  llegar a obstruir los vasos, causando: marchitez,  secado de las ramas, e incluso la muerte del ejemplar afectado cuando la infección se extiende y llega al tronco del árbol. Resulta de gran importancia forestal destacar que son susceptibles los géneros Platanus, Quercus, Ulmus y Acer.

El número de hospedantes establecidos de las distintas subespecies existentes de la bacteria supera los 300, y en muchos de ellos su presencia no manifiesta síntoma alguno. La transmisión se realiza a través de insectos vectores chupadores. No obstante, prácticamente cualquier especie de insecto que se alimente del xilema puede ser un vector potencial de la bacteria.

La aparición de la Xylella fastidiosa se une a una serie larga de organismos patógenos para nuestros vegetales que se han introducido en España en los últimos años poniendo de relieve la incapacidad de la actual normativa de la Unión Europea para el control de los agentes nocivos para las plantas. Con la liberalización del comercio se abrió la posibilidad de una propagación a grandes distancias mediante el comercio de material vegetal desde donde estén presentes los organismos patógenos, y Xylella fastidiosa no es una excepción.

Por parte de las administraciones españolas es patente la escasez de medios para afrontar una problemática tan grave, pues debería haber más inspectores fitosanitarios especializados. Las medidas que legisla la Unión Europea cuando se detecta en un país miembro se cumplen a rajatabla en España, pero estas medidas son un mínimo que se debe cumplir, aunque, en general, a pesar de comprobarse por experiencia que son insuficientes, no se disponen más medios ni planes más ambiciosos de control.

La Sanidad Vegetal y la Sanidad Forestal requieren una mayor atención y dotación de medios que los que le están siendo dedicados. Atendamos al dato de que en solo cinco años se ha extendido esta infección desde Italia hasta Madrid.

         

            SINTOMATOLOGÍA DE LA ENFERMEDAD EN PLANTAS CONTAMINADAS POR LA BACTERIA

 

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                                                              1.- Quercus polustris                                                   2.- Ulmus spp

Fotografías: 1.-Penn State Department of Plant Pathology & Environmental Microbiology Archives, Penn State University, Bugwood.org; 2.-Brian Olson, Oklahoma State University, Bugwood.org

 

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                                                                      3.- Acer negundo                                                      4.-Quercus robur

Fotografías: 3.-John Hartman, University of Kentucky, Bugwood.org; 4.-John Hartman, University of Kentucky, Bugwood.org

 

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Foto.- Olivos muertos en Italia por Xylella fastidiosa

Fuentes: Agronegocios; Nota informativa de Junta de Castilla y León, Junta de Andalucía.

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