El grupo tiene un plazo de ejecución para los próximos dos años y trabajará en el desarrollo de herramientas de digitalización y teledetección orientadas a la gestión sostenible, la biodiversidad y la resiliencia de los bosques españoles.
El objetivo final es continuar con la modernización del sector forestal mediante el uso de la última tecnología que ayude a la gestión forestal sostenible y a la certificación forestal. Entre otras actuaciones, estas herramientas permitirán la captura de datos en tiempo real, la georreferenciación de los bosques sostenibles, su caracterización, el uso de imágenes satelitales para mejorar continuamente el seguimiento y monitorización del estado del bosque, un ecosistema que está en continua transformación.
El Consejo de Ministros aprobó el 27/12/2022, a propuesta del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO), el Plan estratégico estatal del patrimonio natural y de la biodiversidad a 2030 para promover la conservación, el uso sostenible y la restauración del patrimonio, los recursos naturales terrestres y marinos, la biodiversidad y la geodiversidad.
Este plan, que asume los principios fundamentales del Convenio de Naciones Unidas sobre la Diversidad Biológica y su visión a largo plazo de “Vivir en armonía con la naturaleza” adoptado en la COP15, constituye una herramienta clave de planificación a la hora de definir objetivos y acciones para frenar el deterioro de nuestros ecosistemas, a desarrollar en la próxima década por la Administración General del Estado.
Adelanta así los compromisos de España en la materia en el ámbito internacional y de la Unión Europea, en especial los derivados del futuro Marco global sobre la biodiversidad para el periodo posterior a 2020 del citado Convenio, y de la estrategia de la Unión Europea sobre biodiversidad 2030 “Reintegrar la naturaleza en nuestras vidas”, adoptada por la Comisión Europea en mayo de 2020.
El Plan Estratégico cumple con lo establecido en la Ley del Patrimonio Natural y la Biodiversidad aprobada en 2007 y con el componente 4 (Conservación de la biodiversidad terrestre y marina) del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR). Su desarrollo conllevará dos paquetes de inversiones de apoyo directo a cargo de este instrumento, con un primer presupuesto estimado a 2025 de 4 millones de euros.
PEFC España es socio en este proyecto de minería inversa en el que un total de 4.000 hectáreas mineras se convertirán en un laboratorio que devolverá el carbono de la atmósfera a la tierra a través de la gestión sostenible de bosques y pastizales.
PEFC España forma parte de este nuevo proyecto LIFE que se desarrollará durante los próximos 6 años en las comarcas mineras de Asturias (Cuencas de los ríos Nalón y del Caudal), uno de los ámbitos geográficos de Europa más deprimidos económicamente, como resultado del proceso de descarbonización. Más de 4.000 hectáreas serán objeto de estudio y mejorarán su capacidad como sumidero de carbono gracias a la labor de PEFC junto a otros socios y expertos como la Universidad de Oviedo, coordinador del proyecto, Hulleras del Norte S.A., (HUNOSA), Agresta S COOP, Universidad de Santiago de Compostela, Biesca Agroforestal y Medio Ambiente S.L y la Viceconsejería de Medio Ambiente y Cambio Climático del Gobierno del Principado de Asturias.
El proyecto Carbon2Mine, recientemente presentado en el campus de Mieres de la Universidad de Oviedo, está cofinanciado por la Unión Europea y entre sus principales objetivos se encuentra el secuestro de carbono a través de la gestión sostenible de bosques y pastizales para contribuir a la mitigación del cambio climático y mejorar la conservación de la biodiversidad en áreas mineras. Se pretende revertir los procesos de emisión de gases de efecto invernadero asociados a la minería del carbón, restaurando el entorno natural en el que están localizados, y mejorando la capacidad de sumidero de carbono a través de la gestión forestal sostenible y certificación PEFC de los terrenos donde se desarrollará la iniciativa.
En este sentido, una de las acciones será la restauración de áreas mineras a través de modelos selvícolas que maximicen la fijación de carbono para optimizar su almacenamiento, la biodiversidad y el suministro de servicios ecosistémicos en el territorio. Por otro lado, la implementación de una economía circular en la gestión del territorio incorporando cenizas de combustión de biomasa de la Central Térmica de La Pereda (Mieres) como fertilizantes para las plantaciones forestales, permitirá generar electricidad descarbonizada, usando biomasa forestal. Asimismo, se pretende impulsar un nuevo modelo de reactivación económica, basado en la promoción de modelos de negocio enmarcados en el ámbito forestal con una destacable capacidad de generar empleo, atraer población y estimular la economía local, particularmente en áreas rurales.
El proyecto pretende involucrar a los pequeños propietarios forestales para que adopten los modelos desarrollados y contribuyan a convertir las cuencas mineras en un auténtico carbon farming. Se desarrollará una herramienta con la que los propietarios de tierras podrán localizar su parcela y, en función de sus características, obtener una serie de recomendaciones de gestión para que dispongan del modelo óptimo de sumidero de carbono. Esto les permitirá inscribirse en el registro de carbono y comenzar a vender derechos de emisiones que podrán comprar las empresas para reducir su huella de carbono. De este modo, obtendrán un beneficio que hasta ahora no tenían.
La réplica de los modelos del proyecto en otras áreas mineras está prevista para maximizar el impacto del proyecto, asegurando el almacenamiento de carbono a largo plazo.
Desarrollo sostenible de las cuencas mineras
Las cuencas mineras asturianas son el escenario del proyecto Carbon2Mine. Suponen el 5% del territorio minero de carbón de España. Sin embargo, sus recursos han supuesto entre 50% y el 70% de la producción del país durante los últimos dos siglos, lo que da idea del impacto social y económico que están teniendo los procesos de descarbonización en estas comarcas, así como la necesidad urgente de encontrar nuevas formas económicas más sostenibles, bajo una adecuada restauración natural.
En particular, las áreas demostrativas se desarrollarán en terrenos de propiedad pública, un total de 4.000 hectáreas, pertenecientes a la empresa Hulleras del Norte S.A., (HUNOSA), que se fundó originalmente como una empresa de extracción minera para la explotación de las zonas carboníferas asturianas en 1967 y que, en la última década, se ha convertido en una empresa centrada en la transición a la producción de bioenergía, incluida la descarbonización de la producción de energía y la restauración y preservación del medio ambiente.
El clima atlántico ha propiciado en las cuencas mineras el desarrollo de bosques y praderías con un elevado potencial de secuestro de carbono debido a sus altas tasas de crecimiento. Sin embargo, la falta de modelos sectoriales de desarrollo forestal hace que sea una oportunidad única para establecer definitivamente planes de gestión y desarrollo sostenible. Por tanto, las zonas mineras asturianas tienen el potencial y las características para convertirse en una región productora de carbono dentro de España y Europa, ofreciendo una oportunidad para el desarrollo de un plan económico competitivo basado en nuevos modelos sostenibles de gestión de bosques y pastizales para la restauración y el mantenimiento de los ecosistemas. Esto facilitará a su vez el suministro de biomasa sostenible y productos derivados de la madera para mejorar la situación social y económica de la región.
Socios y financiación
El presupuesto total de este proyecto del programa LIFE de la Unión Europea es de 4.293.344,31 €. El socio coordinador es la Universidad de Oviedo y forman parte del mismo: PEFC España, Hulleras del Norte S.A, Agresta S COOP, Universidad de Santiago de Compostela, Biesca Agroforestal y Medio Ambiente S.L y la Viceconsejería de Medio Ambiente y Cambio Climático del Gobierno del Principado de Asturias.